domingo, 4 de marzo de 2007

Incluso con los ojos abiertos, no veo nada

Konnichiwa!

A veces las cosas importantes no se ven con los ojos, por muy abiertos que estén, cosas invisibles que sólo se pueden intuir, descubrir a través del análisis, desde la calma.

No hay peor ciego que el que no quiere ver.

La maravilla puede sentarse a tu lado, el infierno puede estar detrás de ti, a veces ni ajustando los ojos se puede percibir, la tonteria de la botella medio llena-medio vacia, no es tonteria alguna.

El humor al despertar, es el color del mundo para ese día... a veces tenemos tendencia a dejarnos caer en una extraña tristeza congénita sin parar a pensar, y a menudo es el pensar lo único que nos puede sacar de ahí. ¿Cuánto puede hacer uno por su propia vida? ¿Cómo planear la felicidad del tiempo en que ni siquiera sabemos si estaremos vivos?

A veces lo más sencillo es lo más dificil de ver, a veces matar es dar vida, a veces asegurarse vida es morir.

Todos debemos elegir, en un momento u otro, no lo digo por nadie en concreto, ni por ninguna elección en particular, es una constante que nos tiene a todos atrapados, la responsabilidad de vivir lo mejor posible, la responsabilidad de decidir cuánto brilla el sol, porque hasta eso, es decisión nuestra.

Hoy os recomiendo una película sobre un hombre ciego que ve más de lo que parece. Zatoichi.


目を閉めて、見てください。 
"Cerrad los ojos y ved."

Saludos dulcearoma.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola dulcearoma:
Por casualidades de la vida di con tu persona y no puedo negarte que me encantaste con lo que escribes (entre mas leo tus cosas me haces sentir viva) Mi intención de escribirte es poder agradecerte que seas tan transparentes y que publique lo que piensas; alimentas mis días de cosas nuevas y dan ganas de terminarlo. Me agradas mucho sigue siendo tu, yo lo necesito.

dulcearoma dijo...

yow yow! madre santa, se me atraviesan dos gotas lagrimosas de emoción, agradezco profundamente tu comentario y me llenas de alegría.

dulcearoma boquiabierto.

Anónimo dijo...

Existeix molts tipus de relacions, però aquella on la connexió es tant que fins i tot el desig es pot arribar a renunciar, converteix aquesta relació encara més ferma. b.