el otro día imaginaba una cabeza, con celo, tiras de cinta adhesiva que cruzaban la cabeza, tenían una punta en la frente y la otra en la nuca y otra tenía una punta en una oreja y la otra en la otra oreja, y así unas más anchas y otras menos cruzando de un lado a otro en una cabeza con pelo.
Imaginaba eso e imaginaba lo molesto que debe ser... Esta idea me vino conduciendo por la autopista, así me dió por ver que era la autopista para el mundo, grandes tiras de material inerte sobre el cual no vuelve a crecer nada, imaginaba que los arboles eran el pelo y que allá donde había autopista, no había arbol, y miraba alrededor y veía una enorme cabeza de pelo verde con cientos de tiras grises que no dejan salir lo que tienen abajo.
Me pregunto qué ocurrirá cuando el asfalto cubra por completo el planeta, qué ocurrirá cuando salvaje y virgen sean calificativos solo para humanos, es muy probable que yo no viva lo suficiente para verlo, pero es posible que me halle en algún otro cuerpo viviendolo... y probablemente sienta la misma impotencia que hoy.
Pobre Tierra, lo tiene jodido, son demasiados malos... y tienen el poder!
En fin, un beso a todo lo verde que brota, que brote por siempre! dulcearoma, un saludo.
3 comentarios:
Increíble tus palabras, estoy totalmente de acuerdo...
Acabo de despertar y soñé con un lugar natural muy hermoso, justo en la caída del sol y en el sueño me emocionaba muchísimo porque sentía que ese era mi hogar.
Donde haya un hermano árbol, donde haya una flor, donde crezca una plantita humilde entre el cemento, existe la alegría.
Un beso desde el bosque.
la metáfora del celo es realmente impactante... me voy a regar las plantas :)
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